miércoles, 17 de marzo de 2010

Urkullu ve más consolidado el proyecto nacionalista centrista en Iparralde

Urkullu ve más consolidado el proyecto nacionalista centrista en Iparralde
El líder jeltzale considera excelentes los resultados de su partido en los comicios

DEIA/E.Press - Miércoles, 17 de Marzo de 2010 - Actualizado a las 07:25h.

Bilbao. Los 6.306 votos obtenidos por EAJ-PNB en las elecciones regionales francesas del pasado domingo son una invitación "a soñar", en palabras del presidente del Euzkadi Buru Batzar, Iñigo Urkullu. Pero también son, ya con los pies puestos en el suelo, un paso más en la consolidación del "proyecto nacionalista centrista en Iparralde".

El líder de los jeltzales no pudo sino calificar como "excelentes" los resultados obtenidos por sus compañeros de partido al otro lado de la muga, aunque no se haya llegado al porcentaje de voto necesario para pasar a la segunda vuelta de los comicios. Por eso, en una rueda de prensa celebrada ayer en Donibane Lohizune junto al cabeza de lista del PNB, Jean Tellechea, y la también candidata Maitena Ugarte, Urkullu señaló que quizá para algunos haber alcanzado el 6,11% de los sufragios emitidos "no sea motivo de satisfacción". "Pero estos resultados invitan a soñar. No ha sido fácil nuestro trabajo en el Estado francés, con nacionalismo vasco muy dividido en varios partidos, en uno de los Estados más centralistas de Europa. El resultado del domingo supone un paso más para la consolidación del proyecto nacionalista centrista en Iparralde y ratifica el acierto de la línea de trabajo desarrollada, basada en la seriedad en los planteamientos durante muchos años pero, especialmente, en la elección de los candidatos y el programa", subrayó.

más autogobierno Son un paso y también, afirmó, la ratificación de la convicción que siempre han tenido los jeltzales de que, "sobre todo en estos momentos de incertidumbre, el nacionalismo útil tiene presente y tiene futuro", un futuro que, como en Hegoalde, el presidente del EBB ligó a alcanzar mayores cotas de autogobierno en la senda hacia una mayor calidad de vida. "El nacionalismo que defiende el PNV en Iparralde tiene como principal guía de trabajo la gestión y el bienestar a través del autogobierno. Si algo ha quedado demostrado en los años de historia del PNV es que más autogobierno es más bienestar y más desarrollo. Y esto es lo que pretendemos para Iparralde. Es necesario más autogobierno en Iparralde, con más desarrollo e instituciones propias y el PNB será motor en estos objetivos. El nacionalismo del PNV es el nacionalismo que se demanda en seriedad y rigor y tiene el compromiso con los derechos humanos y el rechazo a la violencia".

lunes, 15 de marzo de 2010

Elecciones en Aquitania: EAJ-PNB reúne el voto abertzale en Iparralde

Elecciones Regionales en Aquitania: EAJ-PNB reúne el voto abertzale en Iparralde

RESULTADO RECORD DE EAJ-PNB CON EL LEMA EUSKADI-EUROPAN!

EAJ-PNB obtiene 7 030 votos en el departamento de Pirineos Atlánticos, 6 294, en Iparralde y 753 en Béarn ! EAJ-PNB confima su exito sacando el doble de votos que en las europeas del año pasado. EAJ-PNB obtiene 6,66% de los votos en el norte del Pais Vasco,un histórico resultado liderado por Jean Tellechea.

Lapurdi: 5072 votos 6,43%
Behe Nafarroa: 941 votos 8,75%
Zuberoa: 264 votos 4,61%

En la consulta en iparralde por el autogobierno gana el si con un 78%

Más de un centenar de municipios de Iparralde reclaman órganos de gobierno propios.
Se ha celebrado este domingo 14 de marzo un centenar de consultas populares, con un 78% de los votos a favor de aumentar el autogobierno. El referèndum, que no tiene caracter vinculante y ha tenido la participación de más de 28.000 personas, se ha celebrado junto a las elecciones regionales del estado francés.La entidad organizadora Batera,ha explicado que ha estado tildado de inconstitucional por el prefecto del departamento de Pirineos Atlánticos, Phyilippe Rey.

sábado, 13 de marzo de 2010

Alcaldes piden una institución propia para Iparralde

Alcaldes piden una institución propia para Iparralde
Un centenar de regidores apoya la consulta para este domingo impulsada por la plataforma Batera

Baiona. Ante el "no" sistemático del Estado francés, la plataforma Batera organiza una consulta popular para conocer la opinión de los ciudadanos sobre una posible institución territorial para Ipar Euskal Herria. "¿Está usted a favor de la creación de una colectividad territorial vasca?". Es la pregunta a la que los votantes de Iparralde podrán responder el próximo domingo, el mismo día de las elecciones regionales. Aunque la consulta no tiene carácter oficial, la iniciativa de Batera es muy amplia. 89 alcaldes apoyan la consulta, y el 91% de los electores de Iparralde podrá votar en 122 municipios de los 159 de Ipar Euskal Herria

Más de mil personas trabajarán durante todo el día para organizar las mesas electorales alternativas. La consulta no se hará en el mismo lugar de las elecciones regionales, sino fuera de las salas electorales. Aunque el prefecto de los Pirineos Atlánticos (representante del estado francés en el departamento) advirtió a los alcaldes de Iparralde que ayudar a organizar la consulta es ilegal, los abogados de Batera afirman que la iniciativa es legal, y que el prefecto "amenaza o presiona para impedir la organización de la consulta". De hecho, se han organizado otras similares sobre el tren de alta velocidad o la privatización de La Poste (el servicio de correo), y el prefecto no se manifestó.

DEPARTAMENTO VASCO La reivindicación de la organización de una consulta sobre una institución propia para Iparralde viene desde hace años. Hace más de dos siglos, el diputado de Lapurdi Dominique Joseph Garat fue el portavoz de la primera reivindicación del departamento vasco, después de que en la Revolución Francesa las provincias vascas Lapurdi, Nafarroa Beherea y Zuberoa perdieran su autonomía, y fueran integradas en el departamento Basses Pyrénées (el actual departamento de los Pirineos Atlánticos), con el de Bearne.

En los años 60, el movimiento abertzale Enbata volvió con la misma reivindicación, pero el Estado francés seguía en la misma posición: no aceptaba concederles nada a los abertzales. Al final de los años 90, centenares de responsables políticos y económicos impulsaron una campaña en favor al departamento vasco. En 1995, dos de cada tres alcaldes de Iparralde se mostraron a favor de su creación. Cuatro años después, más de 12.000 personas se manifestaron en Baiona en favor de esta iniciativa y por la oficialización del euskera. Pero la respuesta de París seguía siendo negativa.

Dos años más tarde, el mundo sociopolítico y económico impulsó la plataforma Batera, para reivindicar el departamento, la cámara de agricultura vasca, la oficialización del euskera y la creación de una universidad autónoma en Iparralde. Además, en 2005, el 64% de los electos reiteró el apoyo a esta reivindicación. En 2008, 32.000 electores (un 10% del total) de Iparralde firmaron para pedir una consulta sobre el departamento. Pero la actitud de París no cambia: o no responde o se niega.

La pregunta que plantea Batera ha cambiado respecto de la de años atrás. El término colectividad territorial ha sustituido al departamento, después de haber analizado los cambios institucionales previstos para el 2014. "En esa fecha los departamentos desaparecerán o perderán toda su sustancia", explica Batera. La reforma institucional que prepara el Gobierno francés plantea la simplificación de la estructura institucional de Francia. La Región y las Comunidades de Municipios tendrán más poder, y el departamento se quedará sin peso. Batera subraya que su objetivo no es un departamento, sino el reconocimiento institucional de Ipar Euskal Herria.

jueves, 11 de marzo de 2010

De lo posible. El futuro de Nafarroa Bai

Tribuna Abierta: Uxue Barkos
De lo posible. El futuro de Nafarroa Bai
Uxue Barkos - Miércoles, 10 de Marzo de 2010 - Actualizado a las 07:28h.

Me invita Txentxo Jiménez a asumir lo que considera mi parte alícuota de responsabilidad en el momento crítico que vive Nafarroa Bai. Y me invita a hacerlo de forma pública y en primera persona porque ha sido de forma pública y citando de manera expresa y exclusiva un nombre propio -el mío- como se produce su invitación. Eso sí: me propongo ser tan inmoderamente exigente con las tesis del proponente como éste lo es con el resto de los miembros de Nafarroa Bai. En mi caso, porque creo que si el próximo día 15 de marzo las mujeres y los hombres de Aralar van a decidir su permanencia o no en NaBai, lo han de hacer en libertad. Y sin información veraz, no hay libertad.

Tomo del Príncipe de Viana el lema no sólo por su capacidad poderosa para seguir ilustrando la realidad navarra cinco siglos después, sino por lo que me sugiere con respecto a los últimos capítulos en la vida de Nafarroa Bai, en especial este último de las reflexiones de Txentxo Jiménez. Utrimque roditur, me roen por todas partes… Es cierto que la hondura del lema casa mal con algunas de nuestras actuaciones más memorables. Porque haberlas… las ha habido. ¡Y cómo de memorables!

Como se apunta, algunos somos culpables de haber respondido a momentos de altura con el silencio público. Pero sería mentir si no recordamos que ese silencio no fue sino el respeto más exquisito a lo que cada partido -el concernido en cada caso- decidió. ¡Claro que el juicio sumarísimo en plaza pública que tantos pidieron hubiera sido un recurso bien fácil! Pero ni entonces ni ahora he sido partidaria de la Ley de Lynch.

Tampoco olvido el silencio, lo asumo en lo que me toca, ante el fragor que algunas fogosas declaraciones y teorías impusieron a la actualidad navarra el pasado agosto. Silencio solamente público, porque todos sabemos en la Permanente de Nafarroa Bai que el resto de la coalición exigió -eso sí, con serenidad- poner fin a aquel modo de gestionar el capítulo de la cloaca croata… ¿Debíamos haber comparecido de manera pública para exponer nuestras dudas sobre ese modo de actuar? Sigo diciendo que no. Si acaso, reivindicar que una risa oportuna -o inoportuna- ante el caudal inagotable de chistes demuestra, cuando menos, buena salud mental.

Y hasta ahora tampoco he expresado en plaza pública mi opinión sobre esa decisión de poner fecha de caducidad a Nafarroa Bai, el anuncio del 15 de marzo… Hoy sí debo expresar mi opinión: sí voy a responder a la invitación, y lo voy a hacer con una pregunta:

¿A quién beneficia? ¿Quién se beneficia de esta crisis perpetua y agónica que gravita sobre Nafarroa Bai?

La fecha del 15 de marzo, lo sabemos ahora, parece que tampoco va a ser aclaratoria con respecto a la permanencia o no de Aralar en la coalición. Pero el mal está ya hecho.

Sea ahora, sea en verano, sea cuando quiera que se resuelva -que resolváis- esta incógnita, lo cierto es que el juego de la amenaza sobre la supervivencia de Nafarroa Bai ha tomado cuerpo dentro de la coalición. ¿Es responsabilidad exclusiva de quien puso fecha de caducidad al proyecto? No. Es cierto que otros cantos de sirena sobre proyectos supra forales están mareando la perdiz más de lo que la realidad alienta y la experiencia nos dice. Pero esto no explica, y menos justifica, la tensión gratuita y añadida por la amenaza de una ruptura.

Por eso, no apuntaré como Séneca que el más interesado es el culpable, pero quede claro que quien rompa Nafarroa Bai será responsable de beneficiar a todos aquellos que representan lo que la coalición quiere combatir desde las instituciones, los ayuntamientos, las organizaciones sociales y culturales, los colectivos ciudadanos... No podemos meter la cabeza bajo tierra para no ver la satisfacción incontenida de UPN, a quien sin Nafarroa Bai ya le salen las cuentas del quesito; el alivio indisimulado del PSN, que sin la coalición aspira a no sufrir el batacazo; las urgencias de IUN en sacar a bailar nueva novia… Y así hasta fuera del arco parlamentario, hasta en la izquierda abertzale tradicional que como el resto se está apuntando ya el tanto del final de Nafarroa Bai.

Por encima de todos ellos, y una vez más desde el Príncipe de Viana, la satisfacción de un Estado que sin la coalición se ve liberado de la incómoda circunstancia de una Navarra que se reivindica sujeto político de su destino, frente al objeto que un extremo y otro anhelan: ésta es la clave; éste, el principio.

Y esta verdad, negro sobre blanco ahora, circula como verdad cierta, verdad política extendida por Navarra desde hace tanto tiempo cómo la crisis ha tomado cuerpo. Una crisis que, en mi opinión, ya que se me requiere, tiene mucho más que ver con urgencias e intereses partidarios, con miedos y perspectivas electorales, que con diferencias ideológicas infranqueables. Porque la realidad, le pese a quien le pese, es que la cohesión ideológica de los integrantes de Nafarroa Bai es tan sólida como real es la mayoría navarra que nos exige el cambio. Un cambio que se nos urge porque es posible.

"La política es el arte de lo factible, de lo posible" es la máxima sobre la que se afanó una de las pocas figuras de talla política en Navarra: Manuel de Irujo. La política como el arte de lo factible, de lo posible debiera ser cuando menos -y siempre en la opinión que se me requiere- elemento enriquecedor para algunos de los compañeros de coalición. Basta con recordar cualquiera de los ejemplos de la política maximalista, ejercicios tan cuantiosos como inútiles, con cuyo lastre hemos llegado a la Navarra del siglo XXI.

Si lo único que somos capaces de hacer es proclamar nuestros principios al viento, contentémosnos con hacerlo cada mañana frente al espejo. Mientras, no hurtemos a otros la posibilidad de hacer política: de gestionar el camino para llegar al ejercicio real de nuestros derechos y anhelos políticos desde nuestros principios. Eso y no otra cosa son los programas que a las elecciones forales y municipales llevó la coalición en 2007. Proclamar lo contrario sería tanto como afirmar que alguno se presentó al margen o en contra de sus principios; tanto como decir que hombres y mujeres de Nafarroa Bai, cargos electos en ayuntamientos y Parlamento trabajan sin el sustento de sus principios políticos…

Porque Nafarroa Bai ya no pertenece a los partidos ni a los independientes: Nafarroa Bai -su espíritu, por supuesto- es propiedad de aquella parte de la sociedad, de aquellos votantes que la situaron como segunda fuerza política sin más pruebas sobre nuestra valía que su propio deseo de cambio, su necesidad de oxígeno político. Sobre estas bases, ¿pueden arrogarse el derecho de propiedad de la ilusión del cambio unas cuantas personas reunidas en torno a sus intereses tan legítimos como particulares? Yo digo que no. Más todavía: en Nafarroa Bai cabe todo el mundo que acepte las bases de convivencia pacífica y democrática que impulsan el cambio social en Navarra. No sobra nadie.

Puede seguir adelante sin Aralar, como puede seguir adelante sin EA, sin PNV o sin Ba-tzarre y con más motivo sin Uxue Barkos o cualquiera de los independientes que colaboran con el proyecto, pero no puede sobrevivir a la frustración de la gente que depositó toda su ilusión en un proyecto que traía aire fresco a una realidad estancada y con hedor a componenda. El mismo hedor que hoy sigue explicando la necesidad del proyecto, de la coalición; y el mismo hedor que preside mesa y mantel en aquellos encuentros tan inútilmente escondidos como cobardemente interesados.

Frente a esto, en los últimos tres años, decenas de cargos electos municipales de NaBai han venido trabajando en el ambiente más hostil que sea razonable imaginar, salvando a diario trampas para tratar de llevar adelante el proyecto de cambio bien en el gobierno o en la oposición. ¿Vamos a premiar su esfuerzo y dedicación mandando el proyecto al limbo? ¿Qué les diremos a nuestros hijos cuando sepan que tuvimos la oportunidad de normalizar su sociedad, de hacerla más justa, más solidaria?

Y mientras los beneficiarios de la descomposición de Nafarroa Bai fomentan la desaparición del euskera como lengua en Navarra, el paro sigue creciendo, la industria se desmantela, Navarra pierde posiciones en el conjunto del Estado y de la UE, se endeuda incapaz de lograr suficiencia financiera, se deteriora el modelo de sanidad pública y se dan situaciones ultraderechistas en aplicación de leyes como la de memoria histórica. ¿Alguien puede negar que la necesidad de un proyecto como NaBai está hoy más vigente que nunca? Mirando hacia adentro y si respondemos con responsabilidad y ambición, la respuesta es clara:

¿Diferencias? Por supuesto.

¿Imposibles categóricos? No.

¿Imprescindibles? Nadie, y menos desde la intransigencia.

* Diputada en el Congreso por NaBai

miércoles, 10 de marzo de 2010

Markel Olano:"Colocar la bandera española es una imposición contraria a la opinión mayoritaria de los guipuzcoanos"

Entrevista íntegra al diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, realizada hoy en Onda Vasca desde el Aquarium de Donostia, en la que ha hablado sobre la actualidad del territorio

Vamos a hablar del turismo, porque los datos han sido bastante buenos en plena crisis, cuando todo el mundo se temía un poco lo peor y este el Aquarium donostiarra donde estamos, es uno de los grandes atractivos que tiene Donosti-Gipuzkoa. ¿Por qué está yendo bien, se esperaban estos datos más o menos optimistas?

Bueno ahí lo que sucede, seguramente, es que desde la perspectiva del tráfico, del turismo de cercanía pues seguramente la gente lo que está haciendo es dejar de lado viajes más largos y lo que hace es destinos como el País Vasco, Gipuzkoa en este caso, que están cercanos a Madrid, Barcelona, grandes núcleos, incluso algunos territorios franceses, pues es muy atractivo para viajes de fin de semana o vacaciones relativamente cortas, que sustituyen también viajes largos que en este momento la gente o no puede permitirse o por si acaso no aborda.

En cualquier caso es un buen dato.

Sí, y eso incide también en el hecho de que también poco a poco en el conjunto del país y también en Gipuzkoa se va estructurando la oferta. Nosotros desde luego en Gipuzkoa así lo estamos haciendo, al final estás paquetizando estancias y viajes e introduces cuestiones relacionadas con la naturaleza, con la cultura, con la gastronomía evidentemente, y poco a poco eso va calando en la gente, va sonando cada vez más que visitar Euskadi, visitar Gipuzkoa, visitar Donostia es muy atractivo desde diferentes puntos de vista.

Seguro que tenemos tiempo para hablar de las malas noticias, pero hay otra buena también, que es que ha incrementado el tráfico marítimo en el Puerto de Pasaia en los dos primeros meses de año. No ocurría ya además en un período largo, así que eso también va apuntando, suele ser un buen indicativo esto del tráfico de mercancías en los puertos para saber como va la economía.

Sí, parte además del gran tráfico de Pasaia tiene que ver con la automoción y es evidente que estos últimos meses la venta de coches y la dinámica en torno a ese sector se ha incrementado, pero siempre hay que tomar estos números con prudencia porque sabemos exactamente que ese incremento también se ha debido a unas ayudas que se han puesto sobre la mesa y todo ese contexto, tenemos datos efectivamente positivos pero tampoco podemos pensar que esto es jauja. Realmente todos tenemos la previsión de que este año va a ser duro y que tenemos que afrontarlo con mucha energía.

Vamos a ver Pasaia como vimos en ese montaje, claro estaba preciosa la bahía pero no deja de ser un montaje. Suponemos que además eso cuesta una inversión enorme que no se si ahora mismo las instituciones pueden afrontar con garantías.

Es una cuestión que tiene que abordarse por fases y con un recorrido relativamente largo. Además hay una cuestión que es muy importante. El hecho de que lleguemos a esa foto finish, que sería al final lo que pretende el Master Plan. El Master Plan es un instrumento para tener una idea cabal de adónde nos dirigimos en la regeneración del conjunto de la bahía de Pasaia. Para llegar a esa situación es evidente que primero lo que tenemos que conseguir es sacar la actividad económica que en este momento está dentro de la bahía de Pasaia, y eso no se consigue de un modo total sin construir un puerto exterior. Yo siempre suelo decir que la gente cuando dice que no se debía construir un puerto exterior tiene que ofrecer una alternativa al hecho de sacar la actividad económico del interior de la bahía. Y la única alternativa a la construcción de un puerto exterior es que esa actividad salga de nuestro territorio con las consecuencias sociales y económicas que eso acarrearía, que para mi son inasumibles. Entonces al final estamos hablando de una concatenación de pasos que hay que realizar para que se produzca esa regeneración integral. Es un ámbito complejo, es una especie como de puzzle en el que diferentes piezas tienen que encajar, y precisamente la idea, digamos el estudio que ha ganado por lo menos el concurso de ideas inicial para la puesta en marcha ya de un anteproyecto para la regeneración integral de la bahía lo que ha hecho es precisamente ha sido respetar cada uno de los ámbitos de la bahía, cada uno de los municipios y la personalidad de los diferentes núcleos urbanos y les da una salida a la línea de agua que para mi es muy atractivo, porque eso significa regenerar la bahía y también el conjunto de los municipios que viven alrededor de ella.

Ya decimos que no todo son buenas noticias. Ayer a las 10.30 de la mañana nos llamaba Eneko desde Eskoriatza, tenía 33 años, había heredado un pequeño taller de cerrajería que trabajaba sobre todo para Tesa, con seis empleados, ahora él mismo estaba de autónomo, incluso veía su propio futuro muy negro. Estaba prácticamente desesperado, y no era difícil ponerse en su caso como un ejemplo de lo mal que lo están pasando todas esas pequeñas y medianas empresas que dependen además de otras muy grandes, que aprietan todavía más en tiempos de crisis. Este es el verdadero problema, el rostro de la crisis también en Gipuzkoa.

Sí, nosotros no tenemos una estructura empresarial de empresas muy grandes, nuestra estructura mayoritaria es de pymes, incluso las empresas medianas que no son de un tamaño muy grande pero sí hay una red de empresas tractoras en el territorio de Gipuzkoa que arrastran un montón de actividad económica, pequeñas empresas y servicios. Lo que nosotros decimos es que en este caso, este año va a ser crucial desde la perspectiva del mantenimiento de esa red de empresas tractoras en el territorio. Y nuestra apuesta, hemos puesto en marcha un plan anticrisis relativamente hace un par de semanas, ya con decretos concretos, para apoyar esa estructura de empresas tractoras en el territorio porque si esa empresa se cae, evidentemente, la gente que en este momento, efectivamente, lo está pasando mal, no va a tener ninguna esperanza.

La verdad es que en la foto del otro día del Consejo Económico Asesor del lehendakari lo que faltaba era gran parte de nuestro tejido industrial, que eran las pequeñas y medianas empresas. Y pregunta uno, y quién vela por ellas, porque ahí estaban las grandes corporaciones.

Sí, nosotros en Gipuzkoa lo que tenemos establecido es una dinámica de colaboración público-privada con los representantes precisamente de esas empresas, empresas que son las tractoras del conjunto de las empresas, porque también está la Cámara de Comercio, pero al final el hecho de que esté Adegi allí representa y personifica una parte muy importante de esa estructura empresarial y evidentemente también el hecho de que esté Mondragón pues con ello ya se completa el conjunto, el corazón de la industria guipuzcoana. Y la colaboración que nosotros tenemos con esa vía Gipuzkoa-Aurrera, con esos ámbitos, pues nos hacen tener una visión muy cercana y muy actualizada de la situación de las empresas. Y precisamente eso nos ha llevado a considerar que este año, desde el punto de vista de los pedidos va a ser complicado, pero también desde el punto de vista financiero, las entidades financieras tampoco van a tener una situación boyante, que eso también va a afectar a las empresas. Y en ese contexto es en el que tenemos que actuar para salvar esa estructura que es crucial para el conjunto del territorio, los trabajadores del territorio y también toda una red de pequeñas empresas.

Bueno estábamos hablando de cómo rescatar un poco a esas tractoras, supongo que tendrá que tener también gran dosis de mano izquierda para ser también realista a la hora de decidir qué es viable y qué no es viable.

Sí, hay que introducir una serie de criterios para conceder esas ayudas y para salvar a las empresas. De hecho una parte del decreto que hemos aprobado, precisamente incide en la salvación, en la reestructuración de las empresas que están en un momento crítico. Y evidentemente hay que hacer un planteamiento empresa a empresa. Y cada una de las empresas tiene que mostrar su viabilidad futura, eso lo tiene que mostrar y demostrar, con un plan de viabilidad, pero también requiere un compromiso tanto de los que dirigen la empresa como de los trabajadores. Es decir, la Administración no puede hacer nada a favor de un proyecto si los propios gestores y los propios trabajadores en el proyecto no creen en el mismo. Y hay una serie de requisitos que tenemos que poner d e un modo evidentemente consensuado, pero sobre la mesa para que caso por caso vayamos salvando aquellos proyectos que consideremos cruciales para el territorio.

Bueno dentro de ese plan anticrisis también incluyen otro tipo de medidas casi todas van dirigidas de alguna manera a crear empleo de forma más directa o más indirecta. Llamaba la atención dentro de las medidas sociales un impulso o una iniciativa que quieren poner en marcha en torno a crear nuevas empresas para favorecer el empleo de colectivos en riesgo de exclusión, incluso que ellos mismos puedan crear esas empresas. En qué sentido se dirige esta iniciativa.

Al final el enfoque es el de pensar y constatar que los colectivos que más dificultades tienen en general, y en todo momento para acceder a un puesto de trabajo cuando llega un momento de vacas flacas, de crisis, son las personas que más dificultades tienen para acceder al puesto de trabajo._Entonces ahí de hecho ya, previamente ya existía toda una serie de programas en la Diputación que favorecía la inserción laboral de los colectivos con más dificultades. Ahí tenemos por ejemplo el ámbito del empleo femenino, el ámbito del parado de larga duración, los discapacitados, hay toda una batería de medidas que hasta ahora se ponían en marcha, pero lo que nosotros hemos hecho ha sido en crisis esos colectivos lo van a pasar peor por lo tanto necesitamos por parte de la Administración un instrumento reforzado para hacer frente a esa situaciones. La ventaja que tenemos en el territorio es que tenemos una amplia red de agrupaciones y de entidades sociales que desde la perspectiva de las políticas sociales tradicionalmente se ha implicado muchísimo y entonces la colaboración entre la Administración y esas entidades privadas con un ámbito, con un enfoque social y muy comprometido con realidades diversas, pues es lo que realmente da potencial al territorio y al enfoque en las medidas de política social.

Somos un país muy complejo en esto, Gobierno, Diputaciones, Ayuntamientos, en cuanto a las ayudas sociales. Parece que ha llegado el momento de poner un poco de orden, sobre todo ahora que no hay dinero para todo. El otro día el propio CES advertía que claro que alguien pueda estar sin trabajar cobrando por encima de los 1.000 euros o muy cerca, cuando el salario mínimo interprofesional está en seiscientos y pico euros, pues que puede desincentivar. Parece bastante lógico. Se va a tener que revisar todo este sistema para que no se dupliquen ayudas, para que no se superen ciertas barreras. Otra solución es subir el salario mínimo.

A mi lo que me preocupa es que las personas que estén cobrando esas prestaciones también tengan un determinado itinerario de inserción. Es decir que se puedan preparar y que luego puedan acceder a un puesto de trabajo, es lo que me preocupa. Por lo tanto las ayudas que reciban estén condicionadas también o por lo menos tengan esa tensión de prepararse que no consideren que esa ayuda es para toda la vida y que no requiera un esfuerzo personal de superación.

Está suponiendo un quebradero de cabeza la cuestión de los centros de menores tutelados.

Sí, hasta ahora por lo menos yo la lectura que hago es ha habido, yo no se exactamente tampoco voy a mirar otros territorios, ni los voy a acusar, pero sí ha habido una diferencia terrible en la venida, digamos en la llegada de esos menores no acompañados de origen extranjero y que en algunos territorios, en algunas comunidades autónomas pues prácticamente no tienen ningún caso y en otras, por ejemplo en la CAV, y en Gipuzkoa fundamentalmente estos últimos tiempos pues ha habido un aluvión. Y nosotros desde el punto de vista del territorio de Gipuzkoa las políticas sociales han tenido que adaptarse a esa situación y les ha costado un momento de transición pero yo tengo la constatación en este momento de que ya tenemos una estructura bien asentada, estamos haciendo frente a la situación y evidentemente por un lado las personas que en este momento vienen en condiciones, realmente algunas muy problemáticas, pues tienen una serie de derechos pero también tienen una serie de obligaciones. Eso lo hemos dicho constantemente y es cierto que en las cuestiones que tienen que ver con la seguridad del conjunto de la ciudadanía se tienen que enfocar desde un punto de vista de colaboración interinstitucional. Lo que no se puede pretender es que esta cuestión la resuelva exclusivamente la Diputación, porque la Diputación sólamente tiene un ámbito competencial y las cuestiones que tienen que ver con la seguridad pues tiene que tratarse de la mano de la Ertzantza, del ámbito jurídico, del Gobierno vasco en general. Se tiene que establecer un mecanismo de colaboración interinstitucional para afrontar la situación. En todo caso yo sí tengo la constatación y la impresión de que en Gipuzkoa la estructura necesaria para hacer frente al problema está ya establecida y consolidada.

Si me permite la expresión le han dado la del pulpo en España, por poner la placa esa a propósito de la bandera española. Se lo esperaba claro.

Sí, sí me lo esperaba pero al final es el mundo al revés porque en contra de la decisión mayoritaria y la opinión mayoritaria de la ciudadanía de Gipuzkoa pues recibimos una sentencia por parte del Tribunal Supremo que nos obliga a poner la bandera española en la Diputación y nosotros lo que decimos es que ante esa imposición, que es al final una decisión judicial contraria a la libre decisión de la ciudadanía pues nosotros lo que tenemos que decidir es primero acatar o no acatar esa decisión y no acatarla pues al final te introducen en una serie de consecuencias jurídicas muy graves.

No se si han abierto brecha. No se qué va a pasar en otras instituciones donde también sucede exactamente lo mismo.

Nosotros lo que dijimos en el territorio fue ante esa imposición nosotros evidentemente vamos a acatar esa imposición pero vamos a ubicar ese símbolo en su contexto. Algunos símbolos sirven para unir en la medida que representan a la voluntad mayoritaria de la ciudadanía y otros sin embargo se constituyen en símbolos de imposición en la medida que son instrumentos puestos en marcha en contra de la voluntad. Entonces lo único que hicimos es reflejar eso en una placa frente a la Diputación y consideramos que es una estrategia y es un paso que pueden dar también el resto de instituciones. Además lo dijimos en el propio acto, invité al resto de instituciones a nivel territorial en Gipuzkoa para que hicieran lo mismo. Fundamentalmente yo creo que es a nivel municipal algunos ayuntamientos ya han comenzado a recibir requisitorias por parte de la Delegación del Gobierno y eso al final te lleva a la misma situación a la que ya ha llegado la Diputación.

Bueno estamos tres cuartas partes de legislatura y lo que ha pasado en esta legislatura entre otras cosas es que se han ido fraccionando mucho los grupos políticos y el panorama político en Gipuzkoa. Cree que en la siguiente electoral esto puede asentarse, tomar poso, clarificar quizás, no tanto como uniformizar pero sí clarificar porque es un poco complicado gobernar con escisiones, no escisiones, gente que no ha pasado todavía por las urnas, ilegalizados también.

Yo hago una reflexión general, no podemos olvidar esa situación, que tiene que ver más con la coyuntura general del país. Es decir nosotros tenemos en este momento un Gobierno vasco constituido también expresamente dicho para arrinconar al nacionalismo de las instituciones, se puso en marcha el Gobierno vasco en una coalición PSE-PP con ese objetivo, ese objetivo se ha logrado en el Gobierno vasco a nivel de la comunidad autónoma, pero expresamente se dice y se ha dicho más de una vez que se pretende extender al conjunto institucional, tanto a nivel foral como a nivel municipal. Lo único que yo hago el planteamiento que hago es si esa estrategia existe y se pone en marcha y es indiscutible porque ya tenemos esa primera constatación en el del Gobierno, qué es lo que tiene que hacer el nacionalismo ante esa situación. La primera constatación es que el nacionalismo se tiene que poner de acuerdo en una serie de bases políticas y éticas que son indiscutibles. Una de ellas, un posicionamiento frontal en contra de la violencia terrorista de ETA. Eso sería un ámbito ético en el que el nacionalismo tiene que ponerse de acuerdo. Y segundo, dar una serie de pasos para hacer frente a esa estrategia que pretende arrinconar en este caso en Gipuzkoa a una visión mayoritaria desde el punto social y político. Ante esa situación qué tenemos que hacer, pues primero ponernos de acuerdo en la necesidad de establecer unas bases comunes y en la medida en que pongamos esas bases comunes luego tiene que producirse también una serie de avances que nos lleven al ámbito institucional de un modo acordado.

Pero no está hablando de coaliciones electorales. O sí.

Yo lo que estoy hablando es que tenemos que comenzar un proceso de reflexión en torno a esta cuestión y que evidentemente esa reflexión tienen que llevarla a cabo los partidos políticos, se tienen que poner de acuerdo. En mi opinión yo por lo menos me quedo en el establecimiento del principio, luego cómo se lleva eso a la práctica corresponde a los partidos políticos, yo no voy a entrar a esa cuestión.

El fantasma del armario de Iñaki Goikoetxea

No es un cuento, pero va de cuentos. En efecto. Érase una vez, hace muchos años, en la época de la transición, en la etapa constituyente. Entonces, las fuerzas democráticas alentaron el impulso reformador de las estructuras del Estado, cuyo principal desafío como resulta reconocido pacíficamente, era el autogobierno de las naciones internas al Estado. Ese impulso descentralizador presidió, con las inevitables controversias negociadoras, la coetánea elaboración y aprobación de los Estatutos de Autonomía de Euskadi y de Catalunya.

Recordemos, sin embargo, que el Estatuto de Gernika no concitó el apoyo de determinadas fuerzas políticas (la entonces Alianza Popular lo rechazó porque aceleraba el proceso disgregador del Estado) y no provocó, precisamente, una incondicional adhesión de la nomenclatura política española, centralista y homogeneizadora, sumida en un cierto desconcierto estratégico sobre la etapa que se inauguraba. En cualquier caso, no había otro remedio que atravesarla y soportarla como una especie de purga de los excesos centralistas de la herencia recibida.

Esos momentos fueron efímeros. Pronto se hizo patente la incomodidad que los autogobiernos de Euskadi y Catalunya planteaban a las fuerzas políticas y a las élites estatales. Algunos contenidos estatutarios no eran de recibo para la unidad nacional, se observaban riesgos de ruptura del sistema de solidaridad,…. Se necesitaba una reacción y se produjo. Comenzaba a tomar forma un relato publicitario. Llega el 23F en 1981. Había que rectificar los excesos. Y la política, vergonzantemente, recurrió al apoyo de los expertos quienes elaboraron su conocido informe, base de los acuerdos Gobierno-PSOE de 31 de julio de 1981, para poner orden en el modelo. Había que armonizar: así se hizo con la Ley Orgánica de Armonización del Proceso Autonómico (LOAPA). Habían de recortarse competencias autonómicas: las leyes de bases vinieron a apoyar ese designio con la inestimable ayuda de la jurisprudencia constitucional. Había que extender el modelo de manera uniforme: era preciso servir café para todos y así se hizo. Había que detener los procesos de transferencias: así fue, como prueba el dato de que, en la última década, se han recibido tres traspasos para Euskadi, quedando pendiente un importante paquete (treinta y seis) vinculado, singularmente, a las materias económicas, de empleo y de seguridad social. Los datos se amontonan para confirmar el cierre de la persiana.

Ahora bien, entonces no se proclamaba abiertamente, como se hace ahora sin ningún rubor, que los estatutos habían cruzado la línea roja o que era preciso recentralizar competencias. Por ello, la justificación de la rectificación se encontraba en el informe de los expertos, en las exigencias del sistema, en la voracidad reivindicativa de los nacionalismos catalan y vasco,... Se acuñó, pacientemente, un relato que formó el humus de la operación, le prestó soporte intelectual. Un relato que, como la lluvia fina, ha justificado sutil e inteligentemente, el horadamiento y la quiebra de las bases políticas de los estatutos de autogobierno de las nacionalidades históricas y no ha dudado en utilizar, profusa e impunemente, técnicas de enfrentamiento intercomunitario, apelando a los más rancios tópicos.

En el caso de Euskadi, ese relato ha sido amplificado por otro complementario y más artero: nos habla de que el nacionalismo democrático ha deslegitimado el Estatuto de Gernika. No deja de ser paradógico que EAJ-PNV -el principal motor del proceso estatutario, la fuerza política que ha acunado, mimado y defendido el Estatuto, que ha prestigiado el autogobierno vasco como modelo de creación de bienestar y calidad de vida para las personas- se vea sometido a este raca-raca que encuentra recurrentemente un acrítico eco en los medios y en los creadores de opinión.

Poco importa que el inculpado haga protesta. Nada importan los hechos que, contumaces, nos hablan de que EAJ-PNV haya insistido, con determinación y tenacidad, en la exigencia de cumplimiento del Estatuto y aproveche cualquier oportunidad o resquicio para completarlo. Un ejemplo. Muy recientemente, en 2008, la Ministra Garmendia reiteró la negativa a la transferencia de investigación por considerar que su gestión centralizada era más eficaz. Poco importaba que tal negativa olvidara absolutamente el mandato estatutario que señalaba a la investigación como competencia de Euskadi. EAJ-PNV peleó por la transferencia y la ganó para Euskadi. En vista de este ejemplo, uno más, ¿cómo puede afirmarse, sin sonrojo, que el nacionalismo democrático ha deslegitimado el Estatuto, cuando los hechos acreditan su compromiso en su defensa?. ¿Cómo puede sostenerse, sin rubor, que las fuerzas renuentes a su cumplimiento -el Partido Socialista o el Partido Popular-, que los partidos políticos que, durante largos años, se han negado de manera contumaz a establecer siquiera la negociación y el diálogo y han impedido el desarrollo estatutario y de sus transferencias, que han recortado desde el poder central del Estado las competencias vascas,…sean los grandes paladines del Estatuto?. Frente a esas evidencias, el relato parece haber tenido un cierto éxito.

Un éxito que parece animar a nuevas y osadas aperturas y ampliaciones del relato. Una nueva capa, como la de las matrioskas. Veamos un ejemplo. Muy recientemente, Iñigo Urkullu ha dicho, en el contexto del debate sobre las medidas de combate contra la crisis de empleo y del proceso de reforma de las pensiones, que es un derecho de los vascos la gestión del régimen económico de la seguridad social. Inmediatamente, la Consejera Mendia, tras señalar que esta era una reivindicación antigua del PNV, terminó expresando que “puede que, ante circunstancias nuevas, saquen este fantasma del armario”. Esa fue la respuesta.

Una respuesta que, por cierto, procede de la persona responsable de la defensa jurídica del Estatuto dentro del organigrama del actual Gobierno vasco. Mendia, además, es Licenciada en Derecho. Estas dos circunstancias nos permiten pensar en una doble alternativa: bien la Consejera desconoce el Estatuto, bien, caso de conocerlo, estima que las disposiciones del mismo que se refieren, al menos, a la seguridad social, son disposiciones fantasmas. Ciertamente, no podemos creer que Mendia no conozca bien el Estatuto, por lo que quizá haya querido, en su condición de licenciada en derecho, innovar, creando otra categorías de normas, las normas fantasma, que se añadirían a las retroactivas, las sancionadoras y otras. Nos acabamos de enterar por sus doctas palabras que el Estatuto de Gernika, cuando menos, tiene dos normas incardinables en esta nueva categoría: el artículo 18.2 y la disposición transitoria quinta.

Son normas fantasma que, además, están en el armario. Quizá debiera decir, mejor, en el armario congelador. Ahí las han dejado los sucesivos Gobiernos de Madrid al negarse a cumplir lealmente esos mandatos. Pero para el nuevo relato lo del armario y el fantasma queda muy bien, suena a cuento.

La Consejera conoce dichas reglas, seguro. No le gustan, seguro. Pero, en vez de decirlo abiertamente, opta por negarlas o, mejor, por ridiculizarlas. Y ninguno de los paladines del Estatuto ha rebatido o corregido sus descalificaciones. Ni siquiera desde su partido, cuyo programa electoral refiere la necesidad de legitimar socialmente el Estatuto, utilizando todos los instrumentos y recursos que proporciona, todas sus inmensas potencialidades y expresa su voluntad de asumir un compromiso renovado con el Estatuto. Retórica pura, grandes palabras desmentidas rotundamente por las declaraciones de la Consejera. Por cierto, a diferencia de sus correligionarios de Catalunya quienes han ratificado en su nuevo Estatuto de 2006 la competencia de la Generalitat sobre la gestión del régimen económico de la seguridad social (artículo 165). También los fantasmas nacen en el Mediterráneo. ¿Es Montilla un foco de poltergeist?.

El dedo acusador de los sucesivos relatos a los que, ahora, se suma la innovación de la Consejera, tiene un destinatario: el nacionalismo vasco democrático, pernicioso agente amenazador del Estatuto que, ahora, pretende sacar sus fantasmas. Haría bien la Consejera en leer el consejo bíblico sobre la viga en el ojo propio (Mateo 7: 1-5). Es un buen relato.

Pero, además, debe leer el Estatuto. Dice lo que dice (*). No son arcanos, pueden leerse en el texto estatutario. Se podrá debatir el sentido de sus reglas, el alcance de sus mandatos, se deberán negociar, con lealtad a la decisión estatutaria, los contenidos y las condiciones de los convenios para la asunción de dicha gestión. Lo que no puede hacerse es negar, desconocer y, menos aún, desvalorizar las normas estatutarias mediante el recurso a la broma fácil o al titular periodístico impactante.

Y volviendo al derecho de los vascos sobre la gestión económica de la seguridad social, convengamos que las palabras de Urkullu son conformes al Estatuto. Es una de las competencias del autogobierno vasco que se ejercerá, mejor y más eficientemente, de manera más cercana a las personas. No es una cuestión de veleidades soberanistas o identitarias como el dedo descalificador reitera, cada vez que se plantea una cuestión de defensa estatutaria como, hace también escasas fechas, en relación al modelo aeroportuario y el comité de rutas aéreas.

Tiene razón Mendia en un aspecto: la gestión económica del régimen de la seguridad social es una reivindicación antigua del PNV. Lo que oculta es, precisamente, que dicha reivindicación es la reivindicación del Estatuto, del que se reclama, ni más ni menos, que su cumplimiento. Defienda, pues, el Estatuto, como es su responsabilidad. Defiéndalo entero, no a trozos. Libérelo de sus cadenas y sáquelo del armario.

(*) Artículo 18.2 : “en materia de seguridad social, corresponderá al País Vasco: a) el desarrollo legislativo y ejecución de la legislación básica del estado salvo las normas que configuren el régimen económico de la misma y b) la gestión del régimen económico de la seguridad social”.
Disposición transitoria quinta: “La Comisión Mixta de Transferencias que se crea para la aplicación de este Estatuto establecerá los oportunos convenios mediante los cuales la Comunidad Autónoma asumirá la gestión del régimen económico de la seguridad social, dentro de su carácter unitario y del respeto al principio de solidaridad, según los procedimientos, plazos y compromisos que para una ordenada gestión se contengan en tales convenios”.

martes, 9 de marzo de 2010

EAJ-PNV: "Echar a la izquierda abertzale si pasa el filtro electoral es trucar la fotografía institucional"

Para el presidente del EBB del PNV la Ley de Partidos altera el "juego de mayorías" El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, afirmó hoy que si en las próximas elecciones se "echa" a la izquierda abertzale aunque pase los "filtros" de las Juntas Electorales se estará "trucando la fotografía institucional".

En una entrevista a Radio Popular, afirmó, en relación a la izquierda abertzale, que aprecian cada vez "una mayor voluntad" de ese mundo de apostar exclusivamente por las vías políticas y "por el ejercicio de la democracia". No obstante, a su juicio, ese debate está todavía "carente" de lo que es "la pregunta del millón", que es la que hace referencia a qué es lo que pasa con ETA. "Todo eso está por decir", agregó.

Urkullu afirmó que es "innegable" que la Ley de Partidos ha tenido sus "efectos" para el mundo de la izquierda abertzale, como, a su juicio, también lo ha tenido la sentencia del Tribunal europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo de no admitir el recurso de Batasuna ante su ilegalización.

El líder jeltzale aseguró que ahora lo que se pretende es "echarles" a pesar de que ese mundo pase "todos los filtros" de las Juntas electorales para las próximas elecciones.

En su opinión, la Ley de Partidos pretende la uniformización del Estado haciendo la modificación de la fotografía institucional, porque si, a pesar de pasar los "filtros", hay que "echar a una parte de la sociedad representada en las instituciones públicas" lo que se hace es "trucar la fotografía institucional" y los "juegos de mayorías se alteran".

domingo, 7 de marzo de 2010

"Éste es un Gobierno pasivo que comenta lo que sucede y sólo es actor en temas identitarios"

Joseba Egibar presidente del Gipuzko Buru Batzar del PNV
"Éste es un Gobierno pasivo que comenta lo que sucede y sólo es actor en temas identitarios"
Joseba Egibar está preocupado por la "falta de pulso" del Gobierno de Patxi López. Cuando se cumple el primer aniversario de que anunciara su voluntad de pactar con el PP y desalojar al nacionalismo, el dirigente jeltzale cree que ha perdido un año para meterle el cuchillo a la crisis

Joseba Egibar no tiene dudas de que socialistas y "populares" reeditarán su acuerdo en las diputaciones si los números les dan. (DEIA)

Donostia. ¿Qué impresión le ha dejado la primera reunión del consejo asesor del lehendakari?

La imagen es la de un lehendakari necesitado, no sé si de consejo, que también, como sobre todo de legitimación social. Es un intento de proyectar una imagen de lehendakari cercano, de un lehendakari que atiende. Básicamente, hay una confusión de roles, porque sin negar que el lehendakari se puede asesorar, el auténtico asesoramiento lo tiene en el Parlamento. A quien se tiene que dirigir es al Parlamento Vasco y no lo hace. Es un una foto de atajo, una instantánea. Transmite la sensación de que está en el Gobierno pero no está gobernando. "Voy a tener una reunión con la gente que más sabe de estas cosas, con la mejor gente que tiene este país", me dijo. Pues muy bien.

Es verdad que la crisis no ha golpeado igual en Euskadi que en España, pero no es un consuelo

Nuestro modelo económico de crecimiento era el correcto, pero eso no le pasa a España, que se va a instalar en el 20% de paro y, según los expertos, para mucho tiempo. Es verdad que a Euskadi le está afectando el declive de la economía española, porque no hay que olvidar que un tercio de nuestra producción se vende en España. Ahora tenemos que buscar nuevos mercados. Esa es una prioridad de este Gobierno, apuntalar, desarrollar, innovar en el tejido productivo del sector industrial. Pero ha transcurrido un año y no se han tomado las decisiones adecuadas y el Gobierno vasco dice que no pasa nada, que ya saldremos. Porque tú hayas sido competitivo antes de la crisis no significa que vayas a serlo después. Si no tomas las decisiones adecuadas, pierdes posición y ventaja competitiva. Y eso es lo que le está ocurriendo a este Gobierno. Gobernar no es observar. Este es un Gobierno pasivo que comenta lo que está sucediendo y han sido solamente actores justo en aquello que decían que no iban a tocar: los aspectos identitarios.

¿Cree que le puede estar pesando la estrategia de Zapatero ante la crisis?

Hay algo de eso. Hay un papel asumido de subordinación en el trazo grueso político-económico que pueda definir España. Lo dijo Idoia Mendia en una de sus primeras intervenciones: "en el tema de la crisis seguiremos lo que el Gobierno Zapatero diga y proponga". Aquí tenemos que tomar otras medidas, pero también algunas políticamente poco correctas. Si decimos que las empresas vascas tienen que tomar medidas de ajuste, lo mismo habrá que hacer en la administración, la empresa más importante del país. Pero el Gobierno vasco dedica en los presupuestos 600 millones de deuda al gasto corriente. Ha cambiado la filosofía. En las cuentas de las tres Diputaciones, gastos e ingresos coinciden, y el endeudamiento se da en la inversión. En el Gobierno vasco, no. Se endeuda para gasto corriente. Un gobierno no puede tirar de deuda para gasto corriente. Es como las familias, que no pueden tirar de crédito para comer.

Con su actitud hacia la transferencia de las políticas activas de empleo, el PNV obstaculiza la lucha contra el paro. Lo dice el PSE

Eso es radicalmente falso. ¿Si tan importante es esta competencia, porqué no se transfiere tal cual? Nosotros lo que queremos es que se transfiera conforme al Estatuto. No me transfiera usted el cartel y cuatro competencias y me deje atrás bonificaciones que pueden suponer un diferencial de 170 millones de euros al año. Con un Estado español sin dinero en caja, ¿alguien cree que lograremos en esta negociación la competencia en las condiciones debidas? Para negociar competencias averiadas vale cualquiera. El problema es que aquí, el Gobierno López no tiene ni derecho a protestar.

Ha pasado un año de las elecciones. ¿Cuándo fue consciente que el PSE y PP iban a pactar?

Antes de las elecciones. Me pasé toda la campaña diciendo: "señores, estos van a sumar". Y los números en un Parlamento corto les dan. Estaban con traje de camuflaje, diciendo que no iban a sumar. Y la misma noche dijeron lo que iban a hacer. En este momento andan igual, y de nuevo tienen que vestir el traje de camuflaje, tratando de ocultar el perfil de tándem, porque van a tener que proyectarse sumando, de lo contrario, cae el Gobierno. Afortunadamente, la ciudadanía sabe que PSE y PP van a sumar allá donde puedan.

¿Cómo ve la salud del pacto que une a PSE y PP?

Cada dos meses Basagoiti visita Ajuria Enea para preguntar cómo está la casa. El pacto no está concebido para gobernar, sino para eso que llaman el cambio político, que es precisamente lo que ha rechazado la ciudadanía. Lo dicen las encuestas. El PP sabe que no tiene nada que perder y, además, está en el puente de mando. Visita Ajuria Enea, viene al Parlamento y dice lo que piensa, marcándole el paso al Gobierno.

¿Es Euskadi un oasis político?

El concepto de oasis lo venden en España para decir que en Euskadi somos la excepción. Pero, ¿por qué te entiendes? Porque tienes una identificación política para desplazar al nacionalismo. No puedes vender a la vez que aquí hay normalidad y no hay problema político, cuando es el problema político el que te ha llevado a pactar con tu enemigo político en España.

Y ustedes, ¿cómo llevan su paso a la oposición?

La capacidad de iniciativa está más que demostrada. A este Gobierno se le ha cogido el pulso de forma relativamente fácil. No tiene mucho pulso, y nos preocupa. Nos preocupa su bajo ritmo de trabajo, las pocas ideas que han aflorado, la cantidad de discusiones estériles que han provocado a cuenta de las cuestiones identitarias, que si las banderas, que si la roja, que si las matriculaciones...

Al final no eran tantas las familias que demandaban el modelo A en las escuelas.

En este tema hay una encuesta clara con la participación de 70.000 padres. Que de todos esos padres sólo 300 hayan optado por el modelo A, cuando han creado un debate para potenciarlo... Ha habido un rifirrafe pactado entre Celaá y Oyarzábal para poner en circulación el modelo A. Y esa ha sido la repuesta de la ciudadanía

¿EA apuesta por el "polo soberanista", EB reniega del tripartito, con quien va a pactar el PNV para hacer frente a PSE-PP en las municipales y forales?

¿El mapa electoral va a ser completo? ¿Todas las expresiones políticas van a tener sello de legalidad? Con independencia de esta interrogante es evidente que PSE y PP van a sumar, por eso es tiempo de que todas las formaciones políticas hagan su reflexión. Yo no tengo miedo a esta situación; servirá para clarificar. PSE y PP se están constituyendo en acelerador de muchas cosas, aunque no lo crean. Es una apuesta en la que el Estado ha puesto todos sus reales. Pues bien, la sociedad vasca sabrá responder a eso. Y no desde la constitución de un frente. Una cosa es hacer un frente y otra cosa es hacerles frente. Creo que sí hay que hacerles frente, con cabeza.

El PSE dice que no es momento para modificar el marco estatutario.

Para el PSE no existe un momento salvo que estén ellos, no hay consenso salvo que estén ellos, no hay progreso salvo que estén ellos. El PSE asocia cualquier cambio político-económico a su presencia. Yo creo que es un error. La inmensa mayoría de la sociedad vasca piensa que el derecho a decidir constituye un pilar esencial. Nosotros no vamos a cejar en el empeño.

¿La decisión de Estrasburgo, es un palo en esa línea?

No, porque el derecho a decidir es consustancial al sistema democrático. Dar cauce a través de una consulta a lo que libre y democráticamente quiere expresar la ciudadanía no contraviene ningún principio democrático, salvo que tengas una idea clara de que no vas a permitir el desarrollo de esos principios democráticos.

Los problemas con los sindicatos de la Ertzaintza no eran cosa sólo de los consejeros nacionalistas

Hay una relación con los sindicatos que no siempre ha sido feliz y en este momento le toca a Ares. A mí más me preocupa el fraude que ha cometido en torno a la concepción de la Ertzaintza como una policía integral. Ares sabe positivamente que son las autoridades del Estado español las que tienen que incorporar a la Policía vasca al espacio Schengen para que sea admitida como policía integral y eso no lo han hecho; la presencia en Hendaia no deja de ser un subterfugio. Y al término de la legislatura nos podemos encontrar con una Er-tzaintza subordinada completamente a eso que llaman las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, sometida en esa estructura.