La identidad vasca diaspórica no es un accidente, derivación o degradación de la auténtica identidad vasca. Lo diaspórico es tan auténtico como  lo más autóctono.
La diáspora vasca abarca puntos muy dispares en el globo, encontramos centros vascos en Sydney, Bélgica, Italia, Reino Unido,  Canadá,  Brasil, Argentina , Perú, Cuba, etc. pero que a pesar de la distancia, se caracteriza por una enorme capacidad para adaptarse a nuevos contextos. Sin embargo, al  mismo tiempo, se destaca por el mantenimiento de su cultura y su identidad, incluso seis generaciones después de la emigración originaria.  Un hecho que confirma esta aseveración sería el creciente número  de organizaciones y centros vascos que se establece.  El deseo de mantener la identidad vasca parece  que se mantiene fuerte. 
Hoy como en muchos otros momentos de la historia del Pueblo Vasco, está transitando una situación difícil,  atacan nuestros principales signos de identidad: el Euskera y la cultura. Por esto  me atrevo a pediros  poner en práctica lo   que  expresa  la DECLARACIÓN   final del II Congreso  Mundial de Colectividades Vascas., que dice: 
“Declaramos nuestro compromiso solemne, inequívoco y permanente con Euskal Herria manteniendo vivas las  Euskal Etxeak y cohesionando a las Colectividades Vascas entorno a la IDENTIDAD de  este Pueblo del que
 procedemos, con un profundo sentimiento de cociudadanía y, por lo tanto, de corresponsabilidad respecto a su futuro nacional e internacional”.
NO OLVIDEMOS NUNCA QUE:
Para amar lo ajeno no hay que renunciar a lo propio.
Para amar lo propio no hay que desperdiciar, minusvalorar ni odiar lo ajeno.
Estamos en un mundo plural.
Mariluz Artetxe
