Urkullu cree que el PSOE quiere "borrar de manera definitiva" el "color diferente" en Euskadi
El presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, afirmó que el Gobierno del PSOE pretende "borrar de manera definitiva" el "color diferente" en Euskadi en las próximas elecciones municipales, forales y al Parlamento navarro.
Europa Press Bilbao
En una entrevista concedida a Europa Press, Urkullu insistió en que las palabras del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, sobre que no se legalizará a Batasuna aunque condene la violencia, "tienen un objetivo oculto" y su destinatario "no es sólo la izquierda abertzale", sino también el PNV. Además, defendió el diálogo con ETA porque hay que "hablar hasta con el diablo" y reiteró que la organización es "la tragedia nacional del pueblo vasco".
A su juicio, las declaraciones realizadas sobre la legalización o no de Batasuna "no corresponden a un ministro del Interior", sino que "afecta más al ministro de Justicia o a la Judicatura, en todo caso".
En cuanto a la sospecha de que se pretende desalojar al PNV de ayuntamientos y diputaciones en los próximos comicios, el líder jeltzale recordó lo ocurrido en las pasadas elecciones al Parlamento Vasco y afirmó que no tiene "por qué despreciar que lo que ha sucedido en los comicios del pasado 1 de marzo, no vaya a pasar en las municipales, forales y autonómicas navarras, a consecuencia "de los juegos de mayorías y minorías".
En este contexto, consideró que "la voluntad de PSE y del PSOE es intentar una fotografía determinada del Estado español" porque Euskadi "es la única comunidad que ofrece un color diferente" al del resto de las comunidades autónomas, y el objetivo es "hacer lo posible para que ese color quede borrado de manera definitiva".
"Lo han conseguido con un juego de mayorías tras las elecciones autonómicas, pero se ha visto en las europeas que Euskadi sigue siendo diferente, con mayor porcentaje de voto de las formaciones nacionalistas frente a la suma del PP y del PSE-EE, y esto es lo que se pretenderá corregir en las próximas municipales y forales", apuntó.
En este sentido, dijo que, "cuando se plantea la apelación a la lealtad institucional hacia la actuación del Gobierno vasco, entendiendo lealtad institucional como un juego de subordinación de las diputaciones, que tienen sus propias competencias, lo que se está planteando es: 'mejor también que vayamos a por las diputaciones y los ayuntamientos de las capitales, como puede ser el ayuntamiento de Bilbao'".
LEY DE PARTIDOS Además, recordó que "el objetivo teórico de la Ley de Partidos era el mundo de la izquierda abertzale histórica", pero subrayó que, a día de hoy, "ese mundo sigue sin haber condenado la violencia y sigue existiendo el terrorismo".
Por tanto, consideró que, tras siete años de vigencia de la Ley, "no se ha conseguido nada, salvo que no haya una representación de ese mundo en el ámbito institucional y se permita un juego de mayorías diferente".
"Esto nos tiene que llevar a la lectura de que el objetivo teórico pudo ser uno, pero el objetivo oculto, que siempre ha denunciado el PNV, era que todo obedecía a una estrategia de Estado para poder alterar la composición de las instituciones y que hubiera un desalojo del PNV", manifestó.
Por ello, consideró que esta estrategia todavía tiene su recorrido "en la medida en que haya una aplicación calculada de la Ley de Partidos en cada ámbito electoral y en la medida en que el mundo del MLNV, el brazo político que corresponda a ese mundo, no se distancie del terrorismo".
LA CONDENA DE BATASUNA El presidente del EBB manifestó que su partido no tiene constancia de que el mundo de Batasuna pretenda realizar una declaración de condena de la violencia. "No tenemos más conocimiento que lo que hace algo más de un mes ya estamos viendo en los medios de comunicación sobre procesos de asambleas en ese mundo y de lo que de literatura hemos podido leer en los medios", precisó.
En este sentido, dijo que "ojalá hubiese un planteamiento sincero, taxativo de condena de la violencia y de apuesta sólo por las vías políticas para que pudiéramos hacer política sin excusas, que es lo que en estos momentos se impide en el ámbito de la normalización política de la Comunidad Autónoma Vasca y de Navarra".
A su entender, "está fuera de lugar" que ahora se asegure que no se permitirá la legalización, y las declaraciones de Rubalcaba y del consejero del Interior del Gobierno vasco, Rodolfo Ares, sobre esta cuestión, surgen de "la necesidad de fortalecer esa imagen de cambio en el Gobierno vasco" que los socialistas han articulado en los últimos meses.
El líder del PNV aseveró que "estamos en un nuevo tiempo político que necesita de un fortalecimiento en base a la escenificación de imágenes", en el que "el discurso frente al terrorismo siempre es válido, vale para hoy, para antes de ayer", pero "no tiene más en el fondo porque, desgraciadamente, la realidad sigue siendo hoy la misma que hace tres o seis meses".
"Existe una organización terrorista que tiene como objetivo provocar el terror de la manera que sea y eso es lo que tenemos que intentar atajar desde lo que es el planteamiento del PNV, desde la colaboración policial, judicial, la aplicación del Estado de Derecho, de los derechos civiles, políticos, humanos, y sociales, y también desde una práctica de la deslegitimación social de la justificación política del terrorismo", señaló.
DIALOGAR CON ETATras señalar que desconoce si hablar con ETA es la garantía de que la banda bajará definitivamente "la persiana", tal como afirmó el portavoz del PNV en el Congreso, Josu Erkoreka, precisó que "hay que dialogar hasta con el diablo", también en estos momentos.
A su juicio, se trata de distinguir entre el diálogo y negociación resolutiva. En esta línea, consideró que el Gobierno y ETA deberían hablar de cuestiones técnicas, mientras que "el diálogo político corresponde exclusivamente a las formaciones políticas". "Un diálogo y una negociación política entre los representantes de la voluntad popular es lo que demandamos desde el PNV, no a ETA, sino al Estado español", dijo.
En cuanto a los últimos atentados de la banda, apuntó que se trata de "un mundo endogámico, que vive sólo para hacer lo único que sabe, que es el crimen", y reiteró que "la tragedia nacional del pueblo vasco es ETA". CARTELES Sobre la polémica en torno a la retirada de carteles de ETA, el presidente del EBB afirmó que, "probablemente, el objetivo final" del Gobierno vasco y de PNV sea el de "eliminar la visualización" en las calles de Euskadi de la simbología que pueda suponer "un enaltecimiento del terrorismo".
"La cuestión es cómo se lleva a la práctica, entendiendo que, en la sociedad en la que vivimos, hay que hacerlo con prudencia e inteligencia, sabiendo las limitaciones que se dan en los municipios y las competencias que son de los ayuntamientos", apuntó, para instar a tener en cuenta también el tema de la seguridad.
En este sentido, recordó que existe una Ley de Policía, "que tiene incorporada la coordinación en base a las juntas locales de seguridad". Por ello, consideró que el Departamento de Interior no puede actuar "haciendo caso omiso a la existencia de esa Ley".
"Si en el objetivo final estamos de acuerdo, *por qué no procedemos con inteligencia?. Y, si de lo que se trata es de aparentar ante la sociedad 'yo más', se ha visto que esas medidas no tienen ninguna efectividad", concluyó.